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En los tiempos de mis abuelos, en el ámbito «necesidades» normales en una casa, familia, compras, etc., 1956, por ejemplo, yo 8 años, y en lo que recuerdo, había una cierta «calma» en la mente y el ánimo de la gente.
Las necesidades básicas estaban cubiertas (salvando situaciones extremas de la época). Y las ofertas del mercado comercial, tiendas de barrio, etc., eran las que eran. Acorde con la economía de entonces. Más o menos todos llegaban a fin de mes…
Ansias por tener, comprar, más allá de lo cotidiano, no las percibía entonces. Lo necesario estaba a la mano. Su precio, el adecuado. La oferta y la demanda, ¡equilibrada!
¡Había un cierto orden natural… en casi todo! ¿Hoy?
¡Otro orden, sin duda! ¡Otros valores! Realidades mil… Y otras mil. Muchas de ellas desconocidas para la mayoría. Productos, redes sociales. Servicios. Amazon… “Haz tu compra de naranjas por teléfono y te la llevamos a casa.”
Influencer para casi cualquier cosa… Quiero creer que en el acto de ir al vater/inodoro no hay indicación mejorable distinta por parte de esta gente.
Me viene a la mente el “chiste”, y a la vez enseñanza perenne más que necesaria, que me contó hace años un amigo. Y que ya compartí por este espacio.
─ Iba Sócrates, el filósofo griego, paseando por los pasillos de una gran superficie comercial observando la infinidad de productos colocados en las estanterías. Al llegar al final del mismo, se detenía, miraba hacia atrás y se decía: ¡¡Hay qué ver la cantidad de cosas que hay que no necesito!!─
Cierto que las necesidades de mis abuelos, y padres, eran básicas. Más allá de lujos y modernidades. Pero las ofertas que el sistema crea interminablemente, no busca cubrirlas hoy. Sino fomentar en la persona el ansia por un lado, y por otro mantenerla en un estado de inquietud casi constante. ¡Y por ello, insatisfactorio!
Bom dia:- Outros tempos. Diferentes vivências.
ResponderEliminar..
“” Tenha um domingo feliz, em Paz e Amor ““
.
Igualmente para ti Ricardo!
EliminarChao.
Cuando hago la compra semanal no miro los carteles, dos por uno, si lleva tres paga la mitad, muchas veces llego a la caja y me dicen si lleva otro... la verdad, no quiero otro, en fin, lo necesario es lo justo, un abrazo Ernesto!
ResponderEliminarAbrazos María Cristina.
EliminarMe ha encantado leerte hoy especialmente porque en tu niñez he visto reflejada la mía y estoy muy contenta de ella. Seguro que mi familia no estaba agobiada por ver qué me compraban para Reyes. No me pasa a mí lo mismo: mis nietos tienen de todo y el aspecto "maquinitas" saben que conmigo no va, esa batalla es de sus papis.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo que lo que se está buscando es hacer personas consumistas en serie, que se les meta en el ADN el consumismo y no haya vuelta atrás.
En finnnnnnnm
Hola Tracy.
EliminarTu niñez y la mía... ¿Hemos jugado juntos de niños? :))))))
Abrazos.
La verdad es que se vivía a un ritmo más acorde con nuestras necesidades, y desde luego que apreciábamos mucho más cualquier cosa que se nos compraba. Y también me sumo a todo lo que dice nuestra amiga Tracy. Feliz domingo
ResponderEliminarHola Emilia.
EliminarOtros tiempos. Otro contexto, vidas, necesidades... Lecciones por trascender. A nivel personal y profundo.
Lo que hoy vemos, sobre todo los de "una cierta edad", ya no nos toca vivirlo como nuestros hijos y nietos.
Cada época, sus luces y sombras!
Feliz semana.
Abrazos.
¿Quieres decir que no eres un influencer? :-)))
ResponderEliminarTodo lo que no fuera pagar al contado (es decir, que tuvieras el dinero en mano) no existía en nuestras cabezas... Ni ofertas, ni préstamos, ni tarjetas, ni nada parecido... y así se dormía muy tranquilo.
Mientras tenga un techo que me cubra, comida y agua, poco más necesito... ¡Fíjate, del supermercado, incluso de la tienda de barrio, sigo sin conocer todos sus pasillos! ;-)))
Aferradetes de diumenge, Ernesto.
¡Líbreme Dios de intentar "influenciar" a nadie! :)))))
EliminarTecho, comida y agua... Bueno, se puede ampliar algo más la oferta. ¡Ni calvo ni con tres pelucas!
Unas pinceladas de comodidad, modernidad y asueto, mano de santo!
Abrazos Paula.
When I go back to my parents' past, I think it was a more peaceful time, if I could say so. Of course, they had their share of problems, but they were solvable.
ResponderEliminarHave a nice week, Ernesto.
Traducción:
Eliminar"Cuando recuerdo el pasado de mis padres, creo que fue una época más tranquila, si se me permite decirlo. Claro, tuvieron sus problemas, pero se pudieron solucionar.
Que tengas una buena semana, Ernesto."
Hola Kaya.
EliminarLa "tranquilidad" del pasado era inherente a las circunstancias de vida. Menos cosas, menos "carga". Mayor libertad.
Al alcance de la mano hoy. Sólo qué hay que ser consciente de ello, quererlo. Y aplicarlo.
Feliz semana.
Abrazos.
El bombardeo es tan fuerte que a veces es fácil caer en esa espiral de consumismo y esto lleva a un estado de insatisfacción permanente pues siempre hace falta cubrir alguna "necesidad". Por ello es importante vivir conscientes y en el ahora.
ResponderEliminarAbrazos!
Hola Cecilia.
EliminarReza la enseñanza de sabiduría qué...
"No puedes evitar que un pájaro se pose en tu cabeza, pero si puedes evitar que permanezca el tiempo necesario para hacerse el nido."
Abrazos querida amiga.
Ernesto. Lo que dice Sócrates, también podría aplicar a Buda, ¿te parece? El problema, según creo, no es que exista una infinidad de productos y servicios, el problema es desarrollar deseo y posible apego hacia estas cosas sin preguntarnos si realmente las necesitamos (tal como nos hacen creer) a diario, a todas horas, siempre. Para siempre. ¡Salud!, ya sabes con qué.
ResponderEliminarHola Julio.
EliminarEl "qué", humeante, te está esperando sobre la mesa... Si vienes. Y así entre sorbo y sorbo podemos dialogar sobre algunas cosas que ya vamos conociendo.
Cualquier "sabio" de cualquier tendencia y época, sólo expresará sabiduría!
Abrazos.
Today's world is very comfortable. He doesn't even have to be at home, if he receives an order. More recently, the ordered product is left in a metal box near the house, where it stays for 24 hours, and access is made with a QR code...
ResponderEliminarTraducción:
Eliminar"El mundo de hoy es muy cómodo. Ni siquiera necesita estar en casa si recibe una orden. Más recientemente, el producto pedido se deja en una caja metálica cerca de casa, donde permanece durante 24 horas, y el acceso se realiza con un código QR..."
Hola Catalin.
EliminarLa "comodidad" del mundo actual tiene un cierto coste, a pagar. Que si bien hay "facilidad" para pulsar la tecla del pedido, ya el resto del proceso, pedido y tacla incluido, es otro cantar.
Hoy el consumo desmedido es el nuevo "Tótem" a adorar!
Ahora no estamos contentos si no tenemos el frigorífico lleno y la despensa también llena.
ResponderEliminarQue tengas una buena semana.
Hola Antonia.
EliminarSi sólo fuese frigorífico y despensa... :)))))
Igual para ti.
Ernesto, tu reflexión me ha hecho pensar en cómo el equilibrio que mencionas entre oferta y demanda parecía más natural antes. Hoy, el bombardeo comercial nos empuja a desear más cosas de las que realmente necesitamos. Como decía Sócrates, ¡hay tantas cosas que simplemente no son necesarias! Gracias por compartir estas ideas, invitan a la reflexión.
ResponderEliminarEl último párrafo, para guardar.
Un fuerte abrazo, sensato pensador.
Si amigo Enrique.
EliminarEl ayer, era y tenía! Y si bien no vivo en "caverna", como nuestro amigo Ildefonso afirma, algo más abajo, vivir... :)))))
si me guío por mis dos queridas nietas, 21 y 14 años, como muestra de la juventud actual y valores, no va nada mal la cosa!
Puede que el mundo brame y se convulsione, pero aquí en el valle donde vivimos, el río de la vida que lo cruza, fluye suavemente...
Fuerte abrazo amigo Enrique.
Enhorabuena, tu forma de vida es envidiable.
Eliminar
ResponderEliminar¿Y tú qué necesitas?
“Necesito poco, y lo poco que necesito lo necesito poco”
Un abrazo Ernesto.
¡Tú sí qué sabes Ángela! :))))))
EliminarAbrazos amiga.
Pues es tal cual lo explicas. Es más, se ha visto que tanta tecnología no pudo contra el Apagón,. no servían las redes,ni las tarjetas, ni los transportes eléctricos..en fin.
ResponderEliminarUn abrazo!
Amiga Luna.
EliminarSoy de la escuela filosófica de Sócrates... :))))))
Vivo el mundo, la vida, tal cual me llega. Bastante natural... Pero puedo entender que podría no ser el caso de muchos. La forma de encarar el día a día, la escala de valores que uno aplica, o pretende, y mil detalles más que ya la edad se encarga de seleccionar, puede no ser el de tantos.
Cima a la que escalar, alcanzar, ¡una! Formas de llegar a ella, ¡múltiples!
La vida podría ser algo así.
Abrazos Ale.
A lo largo de nuestra vida "la vida" ha cambiado mucho...
ResponderEliminarHoy existe un frenesí por comprar que uno, que ya vive en su caverna, no llega a entender...
Pero tampoco añoro los tiempos pasados, los de nuestra niñez, cuando a las gentes, en las ciudades al menos, practicamente no le sobraba ni un duro nunca...
Un abrazo, amigo
Hola Ildefonso.
EliminarLo de la "caverna" es un símil bastante gráfico, y simpático, de lo que quieres decir de tu vida hoy.
Abrazos, amigo.
Es una adicción como cualquier otra. Un beso
ResponderEliminarY como tal requiere una toma de consciencia del propio individuo. Aunque en este caso sean millones de millones.
EliminarAbrazo Susana.
Muy reflexivo y certero tu escrito.
ResponderEliminarVivimos en una sociedad de consumo. Todo ha cambiado mucho.
Otra sociedad, otros tiempos...
Un abrazo.,
Feliz semana.
Cierto Amalia.
EliminarOtros tiempos. Otra sociedad... El mismo individuo.
Quien tiene que cambiar-se a sí mismo. Y por ello a la propia sociedad a la que pertenece.
Hay, podría decirse, una regla de oro.
Puede que no tengas claro lo que quieres, lo que necsitas, lo adecuado para ti. ¡Pero sí sabes lo que no quieres, ni necesitas, por perjudicial!
Si a pesar de ello te "apuntas al trágala" que otros disponen para ti, no saldrás del círculo interminable de insatisfacción.
Abrazos amiga.
Buena semana.
Justamente el otro día pensaba en algo que me enseñaron hace muchísimos años, la pirámide de Maslow, que define en 5 los niveles de necesidad, y pensé que se había quedado obsoleta, ya que hoy en día eso ha cambiado, y el reconocimiento, que no estaba en un primer nivel, ha pasado a ser casi esencial.
ResponderEliminarHola Ses.
EliminarMaslow... Nada sé del término. Puedo suponer que representa un "dato" más de los miles que circulan por la red tratando de explicar (enjaular) comportamientos del ser humanos.
He accedido a tu blg. Espacio de interés y desenfado. Algo necesario en estos tiempos.
Chao.
Ni más ni menos.
ResponderEliminarHan metido en la sociedad el ansia crónico de consumir por consumir y no hay quien lo pare, como no sea desde la razón y mentalidad propia y consciente de uno mismo para no hacerle caso. Cuanto más adicto a las compras se es, más insatisfacciones aparecen, pues la sociedad de consumo esconde el mayor de los engaños al haber un efecto psicológico bien cargado: el sistema lo tiene bien aprendido y sabe usarlo.
Materialismo e infelicidad, la consecuencia.
Gracias por ponerlo de manifiesto, Ernesto.
Te deseo un grato día y te dejo un abrazo.
Hola Teo.
EliminarComo bien señalas, sólo desde la razón y conscientes será que las "influencias" del mundo no afecten a la persona. O no la afecten tanto como para amargar sus vidas.
Buen finde para ti también amigo.
Fuerte abrazo.
Pufff, qué agobio, solo comprar y comprar, se nota que tiene billetaje, si estuvieran como yo.... otro gallo les cantaría.
ResponderEliminarUn abrazo.
"Lobi", si la "ocupación" de la gente fuese oír o no el canto del gallo cada mañana, sinónimo de vida simple y natural, desde luego otro gallo cantaría... :))))))
EliminarAbrazos.