domingo, 18 de agosto de 2019



Una vez más, domingo por la mañana… Una vez más… de qué escribo…

He empezado a teclear sobre un tema candente…, 17 de Agosto de 2018, y lo he suprimido! No quiero herir sensibilidades. Pero algunos comentarios al respecto parecen, unos interesados, otros excesivamente simplistas.

Los interesados serían los del establishment, nacional, europeo, mundial. (Grupo de poder, poder establecido, o clase dominante son algunos de los términos usados para referirse al grupo dominante invisible o élite que ostenta el poder o la autoridad en una nación.)

Y los simplistas serían… Aquí guardo silencio pues quien más quien menos los reconocerá sin más.

¿Es que no hay mayor capacidad de análisis para ver la realidad real de las cosas del mundo, nuestro y de los demás?

La sociedad llora, puntualmente, la muerte de un niño, una mujer o un hombre, pero no parece caer en cuenta de cuantos niños, mujeres y hombres mueren cada minuto en el mundo. Y no precisamente por causas naturales!

El ser humano en general (no la víctima de turno), la sociedad en su conjunto tiende a tener cierta capacidad de asimilación del dolor, la desgracia, el sufrimiento o la muerte… ajena. ¡Cierta capacidad! Pues no podría soportar, no lo hace, dosis mayores…

Entonces… ¿A qué poner velas o lamentos a esa, la suya propia, ¡no la real!, dosis soportable?

¡Uy uy uy!… ¿Pero no dijo que no iba a escribir sobre ello por no herir sensibilidades?
¡Y no lo hago! No son mis voces las que se oyen, las que denuncian, las que lloran sin comprender nada…
Son las voces del hambre y de la injusticia del mundo. Y también las del silencio de quienes ya no lloran ni sienten hambre..., por no haber podido alcanzar las costas... de Europa.

Una vez oí a un analista político afirmar, y era una persona relevante, que el mayor “terrorismo” que existe es el hambre!

10 comentarios:

maria cristina dijo...

De esa manera se maneja el mundo, un abrazo Ernesto!

esteban lob dijo...

Y las causas de la desgracia, estimado Ernesto, no están solamente en quienes no los reciben, sino en los que son incapaces de generar condiciones mínimas para que no se vayan.

Abrazo.

Margarita HP dijo...

Así es amigo mío. Se supone que somos los "racionales" y que tenemos un montón de "mentes pensantes" y "economistas"; que somos los "países desarrollados"... pero el hambre sigue existiendo en el mundo. El hambre, las guerras, la violencia...
Es una pena que con tanto desarrollo, economía, pensamiento y raciocinio no seamos capaces de erradicar al menos el hambre.
Un beso muy fuerte :)

mariarosa dijo...


Ay Ernesto, no sé que ha pasado en tu país, sólo sé lo que sucede en el mio y que se presenta de terror. Me digo que yo no puedo hacer entender a los demás que es lo mejor para mi país, si yo no lo sé.
mariarosa

Mucha dijo...

un topico que estaba metido dentro de vos Lindo claro positivo Como a mi me gusta te cuento me molestan los que difaman protestan todo el dia y nunca los ves felices en su bog .Vos no sos asi es por eso que te leo. Un abrazo desde un calor que me derrite

José Manuel dijo...

Los papeles en blanco del domingo...¿Quien los carga? ¿Los hechos, las opiniones progresistas, las simplistas, el hambre, los que se quedan sin llegar por tierra o mar?
Voy a terminar creyendo, Ernesto, que las teclas nada tienen que ver contigo,
porque escribe un robot, o es suficiente la palabra, como en los móviles, o tal vez los pensamientos, que aún revueltos ya se imprimen.
O tal vez sea ¿"la hora" desvelada del alba, o la de acostarse?
Sea como fuere, a estas horas de la noche...lo importante es pensar y que cada uno arrime lo que pueda para hacer un mundo más humano, ¿no?
Un abrazo grande.

Alfred dijo...

A trompicones, el mundo avanza, aun no sabemos donde.
Saludos.

Mari-Pi-R dijo...

Es un problema largo de solucionar del cual no se ve el fin.
Un saludo.

Manuela Fernández dijo...

Puede que la mente tenga un mecanismo de autodefensa ante tanta tragedia y no reaccione hasta que alguien pone cara, nombre, entonces ya la bala llega directamente al corazón y ahí la mente no puede hacer nada, es cuando reaccionamos diciendo: caramba es alguien como yo, mi hermano, mi padre. La mente siempre reacciona ante cualquier intento de agresión a nuestro bienestar, nos pone en alerta e intenta impedir que algo nos perturbe, incluso intenta impedir que nos toquen la conciencia. Estamos inmersos en un mundo banal y no podemos abstraernos de él. No obstante hay gente con sensibilidad que por lo que sea no es del motón y grita por un mundo mejor, un mundo sin injusticias, donde todos podamos comer, crecer, y ser felices. Gracias a estos el mundo sigue girando, lo que no sabemos es hasta cuándo podrán con este peso.

Carmela dijo...

Después de leer el comentario de Manuela, poco más puedo añadir. Estoy completamente de acuerdo con ella.
Un abrazo, Ernesto