Sucedía en el verano de 1974, en un
pequeño pueblo de montaña de la provincia de León lindando con
Asturias.
El alcalde había convocado un pleno
para tratar el tema que, desde hacía unas semanas, tenía
alborotados a algunos vecinos que aseguraban haber visto fantasmas por los alrededores del pueblo.
El del clarín (pregonero) anduvo la
mañana del domingo tocando y voceando la prevista reunión vecinal.
“Por orden del sr. alcalde se hace
saber... que el próximo viernes habrá... pleno municipal... Y se
invita a todos los vecinos a aportar lo que consideren... para la
aclaración de...”
Ni que decir que dicho día estaba la
sala que no cabía un alfiler. Y en la plaza del pueblo una ingente
cantidad de personas, muchas venidas de pueblos aledaños y aún de
la ciudad, formaban pequeños corros comentando el tema... Dos
cámaras de tv y algunos periodistas completaban el cuadro de aquel
memorable día.
Entre los asistentes ya sentados dentro
del ayuntamiento se encontraba el panadero del pueblo, quien junto a
su mujer habían estado ausentes al tomarse dos semanas de
vacaciones. Llegados la noche antes, no se habían enterado de lo
sucedido.
Cuando en un total silencio el
secretario empezó a leer los datos aportados por unos y otros...
“Que en dos o tres noches de luna y
calor sofocante, se habían visto unas figuras humanas de color
blanco, de los pies a la cabeza y se cree que desnudas, corriendo y
danzando por las eras del grano...”
Una sonora carcajada interrumpió el
relato, encogiendo aún más si cabe el corazón de algunos,
provocada por el panadero... Quien cogiendo de la mano a su esposa,
sonriendo también aunque algo sonrojada, y haciéndose sitio entre el
gentío asistente, abandonaron precipitadamente la sala...
Unos días después todo el mundo sabía
lo sucedido. Las sonrisas de los vecinos saliendo de la panadería y
el aumento de la venta de pan indicaban que allí se estaba cociendo
algo...
Para celebrar su décimo aniversario de
bodas, la pareja lo había estado celebrando en privado, y puesto que
la juventud y la pasión seguían vigentes, después de cenar,
descorchar el champan e irse a la ducha juntos, se les ocurrió pasar
por el almacén de las harinas y, húmedos todavía, embadurnarse
bien de ella y salir por la puerta trasera a correr al que te
pillo...
Hola amigo ! Me encantó. Un lindo relato, original y bien estructurado, con un final imprevisto.
ResponderEliminarMe gustó mucho.
Un abrazo.
¡Qué divertido!!
ResponderEliminarMucho bueno hay en León. Y la imaginación que no falte.
Un abrazo.
Jajajaja, qué buenoooooooo!!!
ResponderEliminarUna buena celebración con pasión dejando al pueblo en el misterio.
ResponderEliminarBuen relato, un abrazo.
Hola Ernesto, ¡Me encanta el misterio! He leído con suma atención el relato esperando que fuera una historia escalofriante… Ja, ja, ja, he soltado en carcajadas al leer el desenlace.
ResponderEliminarGracias por arrancarme una sonrisa, que hace mi día más hermoso.
Un cordial saludo, que estés bien.
Original forma de celebrarlo.
ResponderEliminarUna historia realmente divertida.
Misterio unido al humor.
Un fuerte abrazo.
Ja,ja, ja,ja
ResponderEliminarVaya Ernesto, que relato, historia, cuento o recuerdo más original, divertido y apasionado.
Eso sí que es una chulada de fantasmas.
:)
Abrazo grande.
Divertido relato y genial forma de celebrarlo la de los panaderos.
ResponderEliminarA veces lo mas probable se nos hace un misterio, verdad?
Un beso, ernesto.
Hola Ernesto...no veas con la atención que yo me he empapado de pan y todas las viandas del sotano...muy gracioso relato pero tenian chorizos ...jamones y demas "porquerias" del cerdo para dias ...menuda despensa Leonesa...
ResponderEliminarGracias amigo siempre aqui a tu lado con cariño
Abrazos
Amigo Ernesto...me has arrancado una buena carcajada, tan sonora como la del panadero, menudo susto dieron al pueblo y demás moradores.
ResponderEliminarOriginal y privada manera de celebrarlo, un divertido relato, propio para estos días.
Un abrazo.
Ambar
Jajaja, qué fantasmas tan simpáticos y divertida forma de celebrar un décimo aniversario revolcados en harina y a correr a la luz de la luna...
ResponderEliminary encima, aumentaron las ventas de pan
Bonita historia para estos dìas de fiestas
Un abrazo, Ernesto y que disfrutes de tu valle y de buen pan artesano
Me encanta esta historia de fantasmas.
ResponderEliminarTe ha quedado genial.
un beso
Pues me parece fantástico, pero hay que ver como inventan, pero menos mal que comprendieron “el baile de los fantasmas”, y es que en los pueblos enseguida recurren a al almas del mas allá, estando aun en el mas acá…
ResponderEliminarUna entretenida historia amigo Ernesto. Un abrazo.
Hola Ernesto, tu divertido relato me parece tierno y maravilloso por tan singular celebración…Claro que diez años de matrimonio no era para menos….El champan hizo el resto ja, ja…
ResponderEliminarUn cálido abrazo
¡¡Muy bueno!!
ResponderEliminarQue buena forma de festejar.
mariarosa
Jajaja... Qué estupenda celebración :D
ResponderEliminarErnesto, gracias por tu alegre y divertido relato.
Un abrazo
Ernesto que romántico embadurnarse de harina y salir a jugar como cuando eramos niños...creo que es algo que no debemos perder, esa ganas de jugar...por eso quiero pisar los charcos...
ResponderEliminarUn abrazo...
Jajaja, se pusieron traviesos y juguetones!
ResponderEliminarUn abrazo!
Que relato mas hermoso, el amor de verdad corre entre tus lineas con la esperanza y convicción de no haber un hay tiempo que determine el verdadero sentir. Felicidad completa en instantes que pueden perdurar.
ResponderEliminarPD: te dejé la respuesta en mi blog, si soy la misma. y te preguntaba algo acerca de la fotografía actual. Que bueno reencontrarnos. Te abrazo
Excelente relato querido Ernesto, con humor sobre todo y un final inesperado como gran cuentista.
ResponderEliminarTe felicito.
Besos
Muy divertido, unos fantasmas muy originales. Un Fuerte ABRAZO
ResponderEliminarFELIZ DIA
Divertido y genial relato, Amigo Ernesto. Siempre es un gusto visitarte y leerte.
ResponderEliminarBuen fin de semana y besos.
María
que alegre episodio...muy bello en toda su significancia ...llena de ternura y emoción...sorprende , que nos muestra que cosas simples de la vida nos puede dar tanta alegría y nos anima a seguir adelante!
ResponderEliminarsin dudas ellos siguen llenando de ese amor genuino los panes que los otros alborozados llevan a sus mesas...
felicitaciones!
Gracias por estar siempre, por compartir, de eso se trata este medio, de enriquecernos mutuamente... Yo casi no puedo comentar, tengo muchos problemas que resolver y me queda poco tiempo, pero los quiero mucho a todos.
ResponderEliminarBesos y abrazos gigantes con todo mi cariño.