Comprendió que si bien se consideraba buena persona, incapaz de engañar a nadie o coger lo que no fuese suyo, había cosas en la vida que requerían otra visión. Un cierto conocimiento de las reglas de juego, de mercado o supervivencia.
Corría
el año de 1969. Contaba 16 años de edad. Entró a trabajar, junto a
otra joven, en un establecimiento de hostelería cuyo producto
principal era la leche. Vasos de leche. El propietario les recomendó
que procurasen acompañar la leche con un huevo disuelto dentro del
vaso. Que eso acrecentaba el negocio. Empezaron…
Él,
cuando le pedían la consumición, solía preguntar: “¿la quiere
con huevo o sin huevo?”. Casi invariablemente la respuesta era la
misma: ¡Sin huevo!, por favor.
Al
final de la jornada contabilizó 93 vasos de leche sin huevo y 16 con
huevo.
Su
compañera contabilizó 132 vasos de leche todos con un huevo.
La
diferencia radicaba en la forma de plantear el pedido: “¿quiere
usted la leche con un huevo o con dos?… ¡Con uno con uno! Era
también la invariable respuesta del cliente.
Acabó
regentando el establecimiento.
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Es
más sencillo aplicar la ley del mínimo esfuerzo, "con
uno con uno", que enfrentarse a una remodelación de lo que nos
plantean.
(En
publicidad y política, éxito casi asegurado)
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Jehehe.... La verdad que es cierto, como la vida misma.... Un abrazo desde Murcia....
ResponderEliminarHola Ernesto, eso sí que es verdad. La técnica comercial vale para todo en la vida, aplicada en buena medida a cada movimiento que damos.
ResponderEliminarUn gran ejemplo, breve, pero clarificador de lo que es una técnica de venta.El saber convencer sin imponer, utilizando la creatividad que cada persona desarrolla.
Me encanta
jajajjajaaa.. qué gran metáfora para la vida entera. No sólo importan las formas, la picaresca y la imaginación son necesarios para poder sobrevivir en el mundo que nos acoge.
ResponderEliminarMuy buen relato, está claro que le has puesto "un par".
Un gran abrazo Ernesto.
Siempre hay que saber hacer la buena pregunta para obtener lo que uno espera.
ResponderEliminarUn abrazo.
Chica despierta e inteligente.
ResponderEliminarCultivar la técnica de las preguntas es dominar los secretos de la venta. Creo que vender es saber preguntar.
Estoy de acuerdo con esa " ley del mínimo esfuerzo" y que te lo den todo hecho, como veo también inmovilismo y falta de iniciativa y...en los ámbitos que expones.
Uy lo que dan o podrían dar de sí dos huevos jajajaja
Un abrazo Ernesto.
Jejeje... eso es saber vender, la chica tenía grandes dotes para ello y se hizo con el negocio... con bien de huevos ;D
ResponderEliminarErnesto, un abrazo
Muy buen texto, muy buena reflexión. Normalmente nos preocupamos más por responder que por preguntar y las preguntas- si se saben hacer- ya van encaminando la respuesta/ acción del otro a nuestro favor.
ResponderEliminarPor cierto, el título genial!!! Jajaj ;-)
Un saludo
Hola Ernesto, siempre nos haces pensar con tus buenas reflexiones. Los humano somos así, en todo los ámbito de la vida, todo lo damos por hecho. Así no hay necesidad de convencer o persuadir a los demás, de que acepten su punto de vista.
ResponderEliminarUn agrande abrazo.
Estupendo ejemplo para destacar que un buen vendedor tiene las preguntas correctas y con ello el negocio asegurado.
ResponderEliminarTambién se necesitan clientes receptivos, porque en este caso concreto, se podría haber llevado varias negativas del huevo.
Ya se que esto es una metáfora, y muy buena por cierto.
Un abrazo.
La ley del marketing, si fuéramos tan vivos para nuestra propia existencia no? Un abrazo Ernesto!
ResponderEliminarErnesto:
ResponderEliminarQue buena estrategia, es increíble como cambian las cosas de acuerdo a como uno lo plantee. Me encantó.
EL PESIMISTA SE QUEJA DEL VIENTO;
EL OPTIMISTA ESPERA QUE CAMBIE
Y EL REALISTA AJUSTA SUS VELAS.
¡FELIZ FINDE AMIG@!
¡Qué bueno!
ResponderEliminarLo único chungo es que somos carne del marketing.
Besos y gracias por venir.
A menudo aceptamos lo que sutilmente nos imponen. Y tienes razón en la reflexión, una buena táctica de políticos y agentes publicitarios. Nos llevan como a borregos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buen texto. Somos víctimas del marketing: Lo mas importante es vender mas. Lo chungo, como dice Virgi es que a veces puede llegar a ser hasta peligroso, como por ejemplo, en la venta de medicamentos.
ResponderEliminarAbrazo de siempre, Ernesto
Un ejemplo muy bueno.
ResponderEliminarEs importante saber realizar las preguntas.
Feliz domingo. Un abrazo.
Hola Julio David... Lamento no poder comentar en tu blog sin pasar por G+. Cosa a la que no tengo intención de apuntarme.
ResponderEliminarUn abrazo.
Genial!!! en realidad somos más simples de lo que parecemos, los seres humanos. Abrazos.
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