¿En qué momento de tu vida te encuentras? ¿En qué tramo del juego del yo-yo? Ese que consiste en subir y bajar. ¿Estás arriba, estás abajo, subes, bajas?
¿Crees que eres el que hoy eres?
Fuiste niña/o, adolescente, joven… Un día dejaste los estudios, mundo laboral, posible boda, familia, hijos… ¡Hoy puede que ya en otra historia!
Ahora mismo, leyendo esto, eres consciente de que siendo tú siempre, en cada etapa, no siempre calzaste el mismo número de zapato.
¿Y tu mente, tus conocimientos de la vida, tus emociones, tu percepción de que “algo más tiene que haber”, “algo más hay”?
¿Es la «realidad» lo que veo, pienso y vivo? ¿Quién soy yo?
Haces bien en preguntártelo, hoy. Pues a la conclusión que llegues, hoy, ya barruntas que mañana puede haber cambiado. ¡Y así es!
Sólo cuando despiertes a lo «real», o Ello te toque, sabrás qué eres realmente.
_______________._______________
Ni tan siquiera ese Dios al que te encomiendas, desconoces, y hasta denigras, es lo que crees que es.
Aunque pueda creer, que siempre he sido yo, de una misma manera de pensar, está claro que no. Hay muchos condicionantes a lo largo de la vida. Si bien es cierto aquello de que tus primeros veinte años, te vuelven en la etapa final, como muy importantes.
ResponderEliminarAbrazos.
Buena reflexión, Alfred.
EliminarSobre la importancia de la etapa final, creo que el ser humano se encuentra ahí en dos disyuntivas. Lo que le "gusta", y lo que realmente necesita. Y que vendría a ser, a mi modo de ver, saber qué «es» realmente él.
Yo hasta los veinte años andaba perdida. Un beso
ResponderEliminarSusana, los entrañables veinte años...
EliminarSi hoy ya no lo estás, te has ido encontrando, ¡miel sobre hojuelas!
Abrazos.
laa vida es una escalera que vamos ubiendo escalón por escalón. Los primeros escalones los vas subiendo con facilidad. conforme vas avanzando los escalones ya te vas cansando y cuando llegas a la cúspide solamente miras hacia abajo y te recreas con los logros que has conseguido.
ResponderEliminarQue tengas un buen día.
Hola Antonia.
EliminarEl símil de la escalera en relación a la persona lo encuentro válido. En su acepción de "escalar", subir, dejar atrás aspectos superados... Como puede ser la evolución que como seres humanos hemos venido a desarrollar.
Estar inmerso, vivir las cosas del mundo, es normal. Pero hay otra «realidad». Despertar a ella, descubrir lo que uno es en relación a ella, es la razón principal de nuestra presencia aquí.
Comprendo que si eso no se ha intuido ni tan siquiera todavía, no resulta fácil aceptarlo.
Disfruta de tu excelente día.
Your reflection is thought-provoking and honest. It really captures the ups and downs of life and the constant search for understanding who we truly are.
ResponderEliminarTraducción:
Eliminar"Tu reflexión es inspiradora y honesta. Capta con precisión los altibajos de la vida y la búsqueda constante de comprender quiénes somos realmente."
Buen día Melody.
EliminarTus certeras palabras sobre la vida, guía imprescindible para encontrarse a sí mismo.
Con subidas y bajadas hoy estoy en una muy buena etapa, paz y armonía, un abrazo Ernesto!
ResponderEliminarHola Cristina.
EliminarMe consta que por ahí va tu vida. :)))))
Abrazos.
Con matices y variaciones, soy el mismo ser, pero hasta ahí llega la coincidencia. Los cambios se ven en la parte física, pero hay más, ya no reacciono igual que antes, no pienso igual (ni siquiera que ayer), tengo más idas y vueltas que una avenida y más despistes que un carrefour.
ResponderEliminarYo diría que estoy en la etapa en la que el yo-yo se dirige veloz hacia el piso y en la incertidumbre de no saber si se estrellará contra el piso o saltará indemne hacia el cielo reposa mi sorpresa.
Creo que lo único que no cambió es el talle 43 de mi calzado, el resto "work in progress"!
Etienne.
EliminarUna interesante y sincera reflexión sobre ti mismo. Cosa que es de agradecer.
Si me permites un pequeño juego de palabras, que las tuyas ya motivan, diré que estarías gracioso, de niño, calzando es 43... :))))) Dicho lo cual, vuelvo a la parte seria del comentario.
Los cambios físicos son evidentes. En la parte mental y emocional, se les supone, sea en el grado que sea.
Ya en la parte más profunda, la fundamental de tu existencia en el mundo, creo que tú mismo ya la defines.
"work in progress"! ("trabajo en progreso"!)
Es curioso, y revelador de ti, que en tu propio juego de palabras: "...o saltará indemne hacia el cielo reposa mi sorpresa.", ya marques el «cielo» como meta. :))))))
Chao.
¿Y si el yo-yo no sube ni baja, sino que gira? ¿No es acaso el movimiento más real que la posición? ¿Quién decide cuándo estamos arriba o abajo? ¿No es el mismo zapato el que pisa el suelo y el que se eleva? ¿Y si el yo que fui no se ha ido, sino que se disfraza cada día? ¿Puede cambiar lo que soy sin que cambie lo que fui? ¿No es la conciencia de cambio ya una forma de permanencia? ¿Y si lo real no es lo que veo, sino lo que me ve? ¿No es más revelador el silencio entre las preguntas que las respuestas que creemos tener? ¿Y si Dios no es lo que creemos, sino lo que no podemos dejar de buscar?
ResponderEliminarQuizá no se trata de encontrar respuestas, sino de aprender a vivir con las preguntas que nos definen. Porque en cada pregunta que nos hacemos, ya hay una parte de la respuesta que nos habita.
Y como diría Rainer Maria Rilke: “Ten paciencia con todo lo que no está resuelto en tu corazón e intenta amar las preguntas mismas.”
Ha sido divertido leerte y hacer este comentario, querido amigo.
Un fuerte abrazo.
Hola Enrique, querido amigo.
EliminarMe alegra que te hayas divertido jugando en tu comentario... Base perfectamente válida en estas tertulias del blog.
Pero, como ya conoces que "no suelo dar puntada sin hilo", :))))) diré que, en eso de las preguntas sin respuestas, y que en cada pregunta ya hay una parte de uno mismo, me recuerda a, hacer una lista de cosas a comprar en el super y, una vez allí, y ¡no necesitando la segunda parte de la misma, que es adquirir lo necesario!, tal como tampoco la respuesta a la pregunta, volverse a casa sin nada!! jajjajajaajjaja...
Fuerte abrazo, amigo divertido.
The story continues.
ResponderEliminar¡Per secula seculorum!
EliminarPara Catalin.
EliminarYa de regreso, siempre interesante leerte.
ResponderEliminarTe deseo un excelente mes de Septiembre.
Un abrazo.
Bienvenidas seais las que de vacaciones regresáis! :)))))
EliminarBonito día, Amalia.
Abrazos.
Y gracias que no somos los mismos...eso indica que caminamos no?
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Ale.
EliminarY como dice la canción, ¡Resistiré!... :)))))
Sí, evolucionamos!
Lamento esa sensación de tristeza que expresabas en tu blog por la reciente «partida» de alguien querido.
Abrazos.
De todo hay entre subidas y bajadas, preguntas, respuestas, preguntas sin respuestas, respuestas sin preguntas... incluso silencios... y mientras despierte a lo "real" o me toque, la vida sigue.
ResponderEliminarBon vespre, Ernest!
Aferradetes.
Sa Lluneta, menudo "adrenalinazo" nos has dado con tanta subida, bajada, preguntas, respuestas, silencios... etc, etc.
EliminarLo dicho, menudo "chute", pero, estoy de acuerdo contigo, mientras todo sucede, ahí estamos, la vida sigue, y como alguien dijo, “Ya que estamos en el baile... ¡bailemos!”.
Estimado Ernesto
Salud y Felicidad
Waaaoooo... Dos de Mallorca se unen para, “Ya que estamos en el baile... ¡bailemos!”. :))))))
EliminarQuerida Paula y estimado Anónimo, ¿cabe que bailemos los tres?
Abrazos y Salud.
No te confundas Ernest, cuánto me alegraría si mi querido amigo viviera en Mallorca, pero no... como decíamos en nuestros juegos de niños "frío, muy frío"...
EliminarY creo que, por las distancias, podríamos bailar los tres y unos cuantos miles más. :-)))
He, he, he... aferradetes, estimat amic. ;-)
Pues sigo siendo un yo-yo, un poco menos nuevo pero aún intentando divertirme mientras bailo.
ResponderEliminarUn abrazo Ernesto
Hola Loles.
EliminarYa veo que te has "contagiado" de los dos comentarios anteriores y decides sumarte al baile comunal...
Esperemos que el resto de la tertulia mantengan la calma. :))))))
Abrazos.
Buen ejemplo el del cambio de número del pie.eso nos pasa a nosotros, que siendo los mismos vamos cambiando con la edad, acusando las subidas y bajadas de nuestro recorrido.
ResponderEliminarBesos
Buen día Tracy.
EliminarLargo, y fructífero, recorrido llevamos hecho ya! ¡Y lo que nos queda!
Veremos el "balance" final... :)))))
Abrazos.
Al baile me apunto siempre, desde los dos añitos:)))))
ResponderEliminarY eso de subir y bajar… yo cuando subo -que ya la subida cuesta- me quedo arriba, disfruto del paisaje y de las cumbres y además llevo merienda. Consciente, sé que “algo más hay”. Igual me instalo allí…
Un fuerte abrazo Ernesto.
Ángela.
EliminarAlgo "instalada" ya estás desde hace tiempo... :)))))
Baile me consta. Y esas edades, una monada.
Y sí, desde "arriba", la perspectiva es otra historia.
Gran abrazo, Ángela.
He cambiado mucho desde mi juventud a este tiempo de señora mayor y lo que voy entendiendo es que sigo cambiando, no solo físicamente, también en carácter y mi forma de relacionarme con lo que me rodea.
ResponderEliminarAhhh, nunca aprendí a jugar al yo -yo.
mariarosa
Mariarosa.
EliminarTampoco yo he sabido jugar a ello.
Cambios, y más desde la juventud, en cada tramo de la vida. Cada quien a su ritmo y necesidad. Evolución se le suele llamar. Y cada curso, cada reencarnación, una oportunidad de avance más.
Ya sabes, desde la gota que "crees", hasta el Océano que ya eres!
Abrazo.
PD: Entiendo que de joven no sabrías contar esas historias de misterio. :)))))