De acuerdo, Ernesto, ahora bien, este muchacho estará pensando cómo llegué acá y cómo me iré? jajaja. Hay un señor que habla mientras leo tu entrada, de qué se trata? Un abrazote!
Creo que saber donde no tienes que volver es lo más sabio, inteligente y sano. Aunque a veces tropecemos y volvamos a algún punto de partida. Un abrazo!
Muy bueno!! No me considero un prodigio,pero SÍ sé a dónde ya no tengo que volver EN alguna ocasión escribí algo sobre esto .Me ha gustado mucho la reflexión Besucos Gó
Una frase llena de sabiduría es verdad... El paso del tiempo nos suele hacer más sabios, mientras tanto vamos aprendiendo a golpe de lo que nos va ocurriendo. Por eso desde que te encontré vuelvo siempre por aquí a visitarte. Abrazos.
Cuando en determinado momento me preguntaron qué quieres hacer o a dónde quieres ir, no supe qué responder, solo sabía a dónde no quería volver. (dijeron que era un argumento frágil), de haberte leído en aquellos años ...
Un placer conocer tu espacio, veo gente conocida por aquí. Abrazos
Es muy cierto, yo se bien a donde no quiero regresar y en donde no debo permanecer, a donde quiero ir no lo se porque solo vivo el presente desde que falleció mi hija.
Gracias por el comentario que has dejado en mi blog Creo que has dado en el centro de la realidad.Tal vez no sepa que lo que no brota sea ya una misma,porque ya es! Pasando épocas de sombras ,uno no sabe ya a dónde va,pero quiero creer que aún está encendida la luz Besucos y gracias Siento lo que te ha pasado con la cuenta.Espero que se arregle pronto Gó
Hola, una reflexión muy inteligente. Uno/a debe saber a donde debe ir o donde no ir o volver...y si no lo sabe y se equivoca, de eso se aprende. Si acierta, también aprende a que eligió el camino correcto (aunque a veces no coincida "el mejor camino" con el que le haga feliz, sino con la legalidad o lo políticamente correcto). La vida es eso: un ir y venir, un estar y no estar, un dejar pasar, un no sé qué, un qué se yo...algo así indefinible que nos condiciona la mayor parte de las veces.
Hay reencuentros que tambien pueden dar felicidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
De acuerdo, Ernesto, ahora bien, este muchacho estará pensando cómo llegué acá y cómo me iré? jajaja. Hay un señor que habla mientras leo tu entrada, de qué se trata? Un abrazote!
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ResponderEliminarE incluso dónde no debe permanecer.
Escueto y contundente.
Un abrazo grande
Qué gran verdad, aunque a veces cueste darse cuenta de eso... Besos Ernesto.
ResponderEliminarEscueto y preciso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Más cierto y universal imposible.
ResponderEliminarGracias
Hola Ernesto me ha gustado mucho esta entrada tuya
ResponderEliminarGracias :0)
Creo que saber donde no tienes que volver es lo más sabio, inteligente y sano.
ResponderEliminarAunque a veces tropecemos y volvamos a algún punto de partida.
Un abrazo!
Pues si tienes lucidez, ni una palabra más. Un abrazo Ernesto
ResponderEliminarDesde luego que así es, y no todo el mundo sabe donde no tiene que volver. Mensaje corto pero intenso. Un abrazo.
ResponderEliminarY cuanto cuesta, a veces, no volver a ciertos sitios, aun a sabiendas que no deberíamos. Así somos.
ResponderEliminarUn abrazo, Ernesto.
¡Más claro agua!
ResponderEliminarMuy bueno!!
ResponderEliminarNo me considero un prodigio,pero SÍ sé a dónde ya no tengo que volver
EN alguna ocasión escribí algo sobre esto .Me ha gustado mucho la reflexión
Besucos
Gó
Que acertada frase, Ernesto. Yo siempre volveré por aquí;)
ResponderEliminarUn beso amigo!!
Por supuesto que si.
ResponderEliminarLa imagen es muy buena.
Feliz fin de semana.
Muy acertada reflexión, aunque a veces cuesta darse cuenta.
ResponderEliminarBesos
ResponderEliminarMuy sabio, pero el personaje de la imagen sabe como llegó, sabrá como salir?
mariarosa
Efectivamente la experiencia no es suficiente para muchas personas. Muy acertado.
ResponderEliminarSAludos.
Muy acertada la frase, y muy de acuerdo con el comentario de David.
ResponderEliminarAl final como dijo alguien "Se llama calma y me costó muchas tormentas obtenerla"
Un fuerte abrazo Ernesto y feliz día
Creo que no se puede definir mejor amigo Ernesto.
ResponderEliminarUn beso:D
Una reflexión interesante, la inteligencia es esencial para caminar por la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una frase llena de sabiduría es verdad...
ResponderEliminarEl paso del tiempo nos suele hacer más sabios, mientras tanto vamos aprendiendo a golpe de lo que nos va ocurriendo.
Por eso desde que te encontré vuelvo siempre por aquí a visitarte.
Abrazos.
Sabia entrada.
ResponderEliminar¡Feliz Abril!
Cuando en determinado momento me preguntaron qué quieres hacer o a dónde quieres ir, no supe qué responder, solo sabía a dónde no quería volver.
ResponderEliminar(dijeron que era un argumento frágil), de haberte leído en aquellos años ...
Un placer conocer tu espacio, veo gente conocida por aquí.
Abrazos
Es muy cierto, yo se bien a donde no quiero regresar y en donde no debo permanecer, a donde quiero ir no lo se porque solo vivo el presente desde que falleció mi hija.
ResponderEliminarSaludos y abrazo fuerte.
Sabia reflexión!!.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias por el comentario que has dejado en mi blog
ResponderEliminarCreo que has dado en el centro de la realidad.Tal vez no sepa que lo que no brota sea ya una misma,porque ya es!
Pasando épocas de sombras ,uno no sabe ya a dónde va,pero quiero creer que aún está encendida la luz
Besucos y gracias
Siento lo que te ha pasado con la cuenta.Espero que se arregle pronto
Gó
He disfrutado tu escrito Lleno de sabiduria de alguien que sabe vivir
ResponderEliminarfelices Pascuas muchacho
Hola, una reflexión muy inteligente. Uno/a debe saber a donde debe ir o donde no ir o volver...y si no lo sabe y se equivoca, de eso se aprende.
ResponderEliminarSi acierta, también aprende a que eligió el camino correcto (aunque a veces no coincida "el mejor camino" con el que le haga feliz, sino con la legalidad o lo políticamente correcto).
La vida es eso: un ir y venir, un estar y no estar, un dejar pasar, un no sé qué, un qué se yo...algo así indefinible que nos condiciona la mayor parte de las veces.
Abrazos