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| Almodóvar gana, con sus "películas", estatuillas de vez en cuando... El ser humano, ¡casi cada día! |
Ayer
noche viendo una película vi reflejada en la pantalla, “comprendí”,
la dinámica de la vida en el “ser humano”.
Uno
de los protagonistas huía a caballo mientras otro le perseguía.
Cuando el “bueno” dio caza al “malo”, se produjo el
desenlace fatal…
Previamente,
tiempo atrás, el “malo” hizo cosas tan malas que la cosa
requería que el “bueno” se las hiciera pagar.
Que
duda cabe que el “bueno” tenía todas mis simpatías mientras
que el “malo” era merecedor de todas las desgracias… Y
así, entre “estate quieto y ponte bien” fui pasando el tiempo,
cual cáscara de nuez en la corriente de un río embravecido de
emociones encontradas. Y producidas artificialmente precisamente para
ello. ¡Hacerme navegar sin control por mi parte!
Es
decir, lo que "sucedía" en una pantalla de plasma, plana y
sin vida, condicionó mi realidad y mi vida durante un tiempo como si
fuese real. ¡¡Pero no lo era!! ¡Y ahí esta la clave del
sufrimiento y la esclavitud a la que mucha gente se ve abocada.
El
interés que les prestamos a las películas está basado en
las emociones que nos provocan.
Sabemos
que no es real lo que “vemos”… pero lo sentimos
y vivimos como si lo fuese… Y mientras tanto la realidad
“real”, lo que Es, lo que “somos”, oculta tras capas y capas
de “sueños”, ideas erróneas, conceptos extravagantes, risas y
lágrimas, metas, agrados y desagrados… Condicionantes todos,
algunos “sagrados”, otros “sublimes”, otros huecos y otros
rellenos de “nada”.
Y
así transcurre la vida… Y gira el mundo… Y pasa el tiempo… Y
nos vamos, la tristeza de la partida…, y volvemos, la alegría del
nacimiento, a repetir curso. ¿Y cuántos van?
En
el haber de casi todos, ¡miles!
─¿A
dónde quiere llegar con esta disertación?
─¡Tal
vez, yo, a ninguna parte! ¡Si algo le ha llegado
a
usted, es cosa suya
─¿Desaconseja,
pues, el ver la televisión, las películas del cine, las novelas, la
literatura?
─¡Dios
me libre! No son las películas del cine, sus guiones, etc., lo que
realmente le sitúa fuera de su propia Realidad… Son sus propios
guiones, sus “buenos” y sus “malos”, ante cualquier
circunstancia en su vida, los que acaban creando las distintas
películas que, al final, acaban esclavizándolo.
Lo de buenos y malos ya es historia, en la vida ya sabemos que estamos mezclados y más aun, internamente mezclados, un abrazo Ernesto!
ResponderEliminarLa realidad es que todos somos buenos y malos, que cada uno vive a su manera como dice la canción y que además es bueno leer recordatorios como el que has escrito. Ahora me voy al rincón de pensar. Abrazos.
ResponderEliminar¿Y que sería la vida sin emociones?, una senda tan aburrida y tan plana como un paisaje de un solo color, ni un relieve, ni una curva...
ResponderEliminarEsas emociones que pones como ejemplo te hacen vivir, digamos, con intensidad el momento sea bueno o malo, y después de que acaba, tan tranquilo se queda uno, el efecto ha servido para subir la adrenalina aunque la emoción no haya sido muy elevada, :))).
Un abrazo Ernesto.
Ante cualquier espectáculo hay que mantener un cierto distanciamiento, para poder disfrutarlo pero viendo su construcción.
ResponderEliminarSaludos.
Desenmascarar al bueno y al malo, que no me lleve la corriente del discurso reinante, sino ser yo misma la capitana de mi alma...y mientras tanto, averiguar como sea qué es lo que me emociona, de parte de quién me sitúo en la partida. Un abrazo fuerte ernesto
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ResponderEliminarSerá mejor sólo ver películas... al menos ahí sabemos que son mentira.
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices. No es lo que nos pasa sino cómo nos lo contamos lo que constituye el ser que estamos siendo.
Por otra parte, cada vez creo menos en la existencia de la Verdad o, de existir, que podamos conocerla.
Un abrazo grande
Pues yo me paso el día viendo series.... eso también está incluido en el pack?
ResponderEliminarMe hacen pensar de lo lindo...a veces, hasta me meto dentro de la tele y soy la protagonista, fíjate.
Besos Ernesto.
Tal cual.
ResponderEliminarNo puedo agregar nada, empañaría la claridad de este texto.
Mi "sueño" es ser bastante confusa a la hora de querer ser clara... ajajjjj
Un abrazo!
Y tú como si nada, jajajajaja, sin querer provocar nada jajajaja. No serías tú, mi querido amigo.
ResponderEliminarY sí, al fin y al cabo, todos somos guionistas de nuestra propia vida. Y está bien.
Un abrazo Ernesto
Detesto las telenovelas, recuerdo años pasados en los que, cuando daba inicio una y era "aceptada" por una enorme cantidad de personas llegaban a poner nombres de los protagonistas a sus niños o decir, "yo soy ella o él", era y es algo descabellado.
ResponderEliminarMe gustan los documentales pero hasta en ellos guardo cierto distanciamiento y no lo siento a raja tabla como algo totalmente real. AL final, todos somos guinistas de nuestra historia.
💋
El cine sirve para pasar un buen rato, siempre que la película te enganche, ya que se trata den eso, de disfrutar durante 90 minutos de una ficción parecida a la realidad.
ResponderEliminarSolamente los buenos directores te hacen disfrutar del buen cine, hoy gracias a la infinidad de medios podemos contemplar buenas películas en televisión en las distintas plataformas.
Un abrazo.
Después de muchos años he vuelto a ver una peli en un cine de verano.
ResponderEliminarUna forma diferente de ver el largometraje a cielo descubierto.
Me recordó los viejos tiempos cuando ibas con tu silla a la plaza del pueblo para ver la función.
Al menos, Ernesto, en las películas suelen ganar por lo general"los buenos". Algo es algo.
ResponderEliminarMi querido Ernesto, la de lágrimas que he derramado yo viendo pelis. Y leyendo libros... Y la de risas también, que hasta del sofá me caí un día partida de risa. Así, tal como suena. Y es que soy muy bruta y muy espontánea. Lo admito.
ResponderEliminarPero eso que nos cuentas hoy... pues me ha dejado pensando. Sí. Tal vez más de una vez, y de dos, y hasta de tres... nos vemos reflejados en algún personaje de cine (no entro yo si bueno o malo) y la pantalla que nos separa de la ficción se borra durante hora y media.
Besos :D
Efectivamente, vivimos las películas como si fueran ciertas. El cerebro debe de enviar los mismos códigos ya sea ficción o realidad y sentimos lo ficticio a veces incluso con más intensidad (yo las películas de miedo no las puedo ver). Qué es la realidad? Es todo aquello que sentimos.
ResponderEliminarSAludos.
Muy buena tu reflexión Ernesto y totalmente cierta que ocurre así, durante el tiempo de una película, siempre nos identificamos con el bueno, bueno en la película para que nos atrape su trama. Sabemos que es una farsa con un guión hecho para impactar... y nos atrapa durante el tiempo que dura, viviendo algo que no es nuestro.
ResponderEliminarY sin embargo, a pesar de saber que es una película solamente con trucos de miedo o demoniacos, yo soy incapaz de ver películas de miedo, me dan miedo, me has hecho pensar con tu entrada, jolines ¿por qué tengo miedo a algo que no es real...? ¿por qué me da miedo? jo, ahora debo meditar esto pero lo siento así.
Un abrazo con cariño
Te adentras en el argumento y parece que todo es realidad. Será que son muy buenos actores.
ResponderEliminarUn abrazo. Felices días.
Hace un rato terminé de ver la película, Rostros en la oscuridad que, después de terminada la sigo analizando y me acordé de tu entrada y de este pequeño fragmento de la misma.
ResponderEliminar"El interés que les prestamos a las películas está basado en las emociones que nos provocan."
😗
ResponderEliminarGeneralmente las películas y los libros de ficción, están basados en sucesos o hechos reales que han sucedido en el tiempo o que pueden suceder... Solo hay que observar lo que, en realidad, pasa en el mundo; a lo que es capaz de llegar la mente humana.
Creo que esa es la razón por la que condicionan, lo que vemos en la pantalla o lo que se lee en muchas novelas.
Siempre un placer, pasar por tu txoko. Musuak.
Tiene su gracia para mí lo de, "entre“estate quieto y ponte bien” fui pasando el tiempo"...
ResponderEliminarCreo que, si hicieramos caso al "estate quieto" ante palabras, silencios, gestos, interpretaciones, malentendidos...otra sería la dinámica de la vida y otra la Realidad a percibir.
Inevitable que una película, un acontecimiento, una noticia, la vida en si, nos provoque emociones, el quid está en cómo las gestionamos, evitando así sufrimientos innecesarios.
Un fuerte abrazo Ernesto y feliz día de hoy.
Buenos días. No he tenido tiempo de leerte. Y tengo que irme en este momento, pero me dicen que es tu cumple, y quiero enviarte un fuerte abrazo y que seas feliz 365 días. Seguro que nos deleitarás con tus pensamientos que hacen pensar.
ResponderEliminarCreo que necesitamos ver y hasta montarnos nuestras propias películas.Sin ellas,la cruda realidad nos mataría cada día más de lo que ya nos matan las falsas realidades.Soñar para sobrevivir a un mundo sin sueños.
ResponderEliminarAbrazo Ernesto
ResponderEliminarEl bueno y el malo. Como en las películas y en los cuentos, en todo hay un mensaje, él que quiere lo ve y él que no; se entretiene y punto.
mariarosa
A mí esto me pasa más con los libros que con las pantallas. Pero sí, algunos dan para pensar demasiado. Y a propósito de los "buenos" y los "malos" ya sabes lo que dicen, ni los buenos son tan buenos ni los malos son tan malos...
ResponderEliminarUn saludo, Ernesto.
ResponderEliminarGracias Ernesto por haberte acordado de mi cumpleaños. Un abrazo.
mariarosa
Te deseo una semana muy feliz. recordándote.
ResponderEliminarAbrazos
Marina
Buen dia desde un maravilloso verano con mar y arena. Por el atardecer veo Netflix. Ví la película- Ni fu -Ni Fa-
ResponderEliminarQue sigas disfrutando dias de paz con sol...
El cine tiene un gran poder de movilizar el mundo a nuevas formas de comprender la realidad.
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