domingo, 10 de diciembre de 2023

...ni con tres pelucas!

 




 Dormido en el sofá me dieron las 6:18… Un vaso de leche, unas galletas. Abrir la correspondencia del banco, la nueva tarjeta de crédito, etc. ¡Las 6:58! Abro el ordenador.

Domingo. Amanece en alguna parte...

¿De qué escribo? ¿A quién me dirijo? ¿Digo lo que pienso sin más, o tengo en cuenta al auditorio? ¿Brindo por el nuevo día, y sus avatares, o me centro en el anuncio que pienso publicar en Walapop?

Nada nuevo bajo el sol… de la mente. ¡O no!

Sobre el escribir… en los blogs. Cuando se ha planteado esta cuestión, ¿de qué, a quién?, surgen algunas voces que dicen:

- “tú escribe lo que quieras, si te leen bien y si no también.”

- “¿o es que escribes para los demás?”

¡Ni “calvo” ni con tres pelucas!

Cierto que escribimos lo que queremos, pero si lo hacemos sin tener en cuenta a los “destinatarios”, y más cuando nos conocemos todos, corremos el riesgo de publicar “infumables” que a nadie interese. Y si bien escribimos por el placer de hacerlo, mayor placer es conseguir la comunicación con los demás.