"Permite que mi manto de paz y tranquilidad caiga a tu alrededor y te envuelva completamente. En la quietud y la confianza estará tu fuerza. Yo puedo obrar a través de ti cuando estás en ese estado de conciencia, no importa lo que estés haciendo."
Estas palabras pertenecen a un pequeño libro que llegó a nuestras manos hace más de 25 años. El haberlo comentado hace poco con una gran amiga, me ha hecho cogerlo hoy de la estantería... Abrirlo al azar y, como entonces, leer...
Dios me habló.- Eileen Kaddy.
Todo está dicho ahí, un abrazo Ernesto!
ResponderEliminarHow long does peace last? 🙂
ResponderEliminarMagnífico, Ernesto. Espontaneidad y acierto.
ResponderEliminarFeliz tarde.
Seguramente, con tanto ruido al rededor, la voz de Dios, no llegamos a escucharla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenos días Ernesto, gracias por este mensaje tan esencial, creo que las señales llegan a través de diferentes vías, cuando menos imaginamos y más las necesitamos.
ResponderEliminarUn gran abrazo cargado de aprecio.
Paty
Bello mensaje el que compartes Ernesto, ese librito ha de ser un tesoro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Precioso e inspirador.
ResponderEliminarBesos.