sábado, 7 de enero de 2023

¿A las cinco en el viejo café?...



Hoy llueve. Hace viento y frío. Se acabaron las fiestas navideñas. Toca recoger el árbol, las bolas de colores, el espumillón. Y…

Hacer frente a la realidad del “día después”. Despejado ya de bambalinas, ilusiones, proyectos varios, algunos saltos en el vacío, etc.

¿Ganamos algo con el cambio de tercio?… ¡Sin duda!

Quienes se desviaron, por unos días, de la realidad de cada quien, ¡volver a ella!

Quienes vivieron cada amanecer y el ocaso al finalizar el día, en toda su naturalidad, continuar la senda de vida que los conduce a cada instante a sí mismos.

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─¿Pero usted no pregona dejar ya las bambalinas?... ¿A qué esta fiesta que ha montado aquí arriba?

─¡Ande ande! Deje de intentar etiquetar todo en la vida y súmese al grupo. ¡Merece la pena! Y sobre todo, relativice!

20 comentarios:

- R y k @ r d o - dijo...

Hoje começa a vida igual a 15 de Dezembro último. Acabam-se as delicadezas, simpatias, solidariedade, cumplicidade, e, até, se deixa de dar a salvação ao vizinho.... Ao pobre da rua nem se olha. O normal desta vida.
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Saudações cordiais … Feliz ano de 2023.
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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María dijo...

Creo que todo es tan real o ficticio como quiera vivirlo y sentirlo cada uno. No creo que porque se acabe la Navidad tengamos que abandonar su espíritu, el de verdad. De hecho ese es el gran drama, que nadie siente de verdad nada y por eso la hipocresía se instala en le ánimo de los que no son capaces pero se ven arrastrados por la vorágine del momento. Lo que debería hacernos recapacitar es ¿por qué nos cuesta tanto ilusionarnos en esta vida? porque la esencia de la Navidad, no son el árbol, ni las bolas de colores, ni las comilonas, ni siquiera el matiz religioso de estas fechas, no, para nada! Creo que la esencia es ese espíritu ilusionante que debería envolverlo todo y que desgraciadamente ya casi solo existe en los niños. Los adultos ( algunos, porque a mi, no pienso dejar que se me muera la niña que vive y vivirá siempre dentro de mi ; ) hemos olvidado esa parte infantil de asombro y curiosidad frente a todo lo que vivimos. Cualquier bobadita inapreciable debería hacernos brillar los ojos, pero vamos como zombis por la vida y esa es la pena y por eso esa sensación de irrealidad y de volver a la normalidad como quien tiene que volver al trabajo después de las vacaciones ; )

Un abrazo fuerte, con café humeante e incluso copita para que te animes, que creo lo necesitas jajaja


PD
No me dio tiempo a comentarte en la otra entrada, pero solo decirte que no le des importancia, esos comentarios son como la basurilla que se acumula en las calles... déjala correr que el agua limpia todo ; )


Buen finde!

Alfred dijo...

Relativicemos pues!!!

Un abrazo.

Paty Carvajal dijo...

Hola Ernesto, buenos días querido amigo.

Para mí “lo real” es la combinación de todo, de lo imaginario, lo circunstancial y lo rutinario (o como se le dice, más concreto). Creo que tendemos a minimizar la importancia de aquello que no podemos palpar y de todo aquello que dura muy poco, pero creo que nuestra vida se ve enriquecida con estos festejos, así sean de vez en cuando, me refiero a todo tipo de celebraciones. Es lindo ver la alegría que se desprende y que explota en los corazones desde el inicio de los preparativos. Todo ello, crea la ilusión de un mundo mejor, menos estresado, menos apurado, más unido, más alegre y mucho más amoroso. Es como colocar, de vez en cuando, chispas de chocolate sobre el mismo café de todos los días, sabe distinto, lo amargo sabe un poquito dulce y eso da placer.

Te dejo un enorme abrazo amigo y aunque seguramente ya te lo dije antes, te vuelvo a desear un grandioso año.

Paty

Tatiana Aguilera dijo...

Son dignas de observación psicológica el comportamiento humano en estas fiestas, hasta los ladrones y tránsfugas tienen sus códigos y se comportan o actúan un poco más amables. Todos intentan ser y parecer un poco mejores de lo que son. Juegan por algunos días a ser padres amorosos y dedicados. Compran todos los regalos solicitados en la carta de petición y, al día siguiente parten al trabajo y en la tarde olvidan de saludar a sus hijos. En los trabajos, el jefe que otorgó un aguinaldo navideño se vuelve a comportar como el déspota de siempre.Por esa razón no permito que me quiten mi derecho a ilusionarme por un mundo mejor, mil veces prefiero ser con mis millones de defectos, pero siendo todos los días la misma persona.

Abrazos amigo Ernesto y, a continuar escribiendo y reflexionando que la vida es demasiado bella y corta.

Catalin dijo...

Before. Only before. With all the power!
All sunrises and sunsets will be majestic!

AMALIA dijo...

Mejor es seguir la realidad. Con ilusión al menos.
Un abrazo.

Ildefonso Robledo dijo...

Vivamos el dia a dia, amigo, que no es poco... Si las Fiestas pasadas nos han traido un poco mas de felicidad, por las cuestiones familiares, pues bendito sea...

Un abrazo

Margarita HP dijo...

Ay amigo mío, pues sí, se guardó el árbol en una caja, junto a bolas, espumillones y también las ilusiones y curiosidades que traen esos días llenos de luces... pero que al fin y al cabo, son igual que el resto, solo que algo más decorados. Ahora, pues como siempre, vivir el día a día, poco a poco y segundo a segundo. Besos :D

lunaroja dijo...

Pues sí... pasadas ya las fiestas (cada vez vividas en mi casa,con mayor conciencia y humildad) sigue la vida.

Me acordé de ti el otro día leyendo un libro de Eckart Tölle, "Una nueva tierra".
Si no has leído nada de él te recomiendo este en concreto.
Sé que ya me has dicho que no leías más este tipo de libros,pero,dale una oportunidad.

Un abrazo.

Enrique TF dijo...

Cierto, Ernesto, ya toca relativizarse, no hay otra, bueno, mañana todavía tengo un cuento de Navidad para contarle a mis tiernos nietos.
Feliz noche, Ernesto.

Majo Dutra dijo...

Um pouco de brilho na vida, não deixa ninguém frustrado com o fim da festa!
Abraço
~~~~

Mujer de Negro dijo...

Todavía falta camino, Ernesto, hasta el dos de febrero, es el cierre del ciclo navideño, pero yo ya he tirado la toalla, no doy para más =)

Lo que sí, que me he prometido este año empezar el día con una o dos tazas de té =)

Un abrazo

Loles Miva dijo...

Hola Ernesto. Cambia en mi Navidad que vienen mis hijos, que te ya viven fuera. Este año he tenido la suerte de que la mayor llegó hace unos días, y viene para más de una semana! Es ese disfrute de los que están lejos, el poder escucharlos en directo, el que se me prolonga este año, y yo feliz como una perdiz! A seguir viviendo! Un abrazo fuerte

Tracy dijo...

No hacemos otra cosa que relativizarnos constantemente.
Buen domingo

maría cristina dijo...

Dale! A las cinco en el viejo café! Un abrazo Ernesto!

Rosa Mª Villalta dijo...

Sí, mientras tengamos vida, se sigue la realidad de la mejor manera posible. Y mejor vivir cada instante, sin planificar, el momento que se vive ahora es todo menos ilusión.

Preciosa entrada.
Saludos cordiales.
Rosa María Villalta

Menta dijo...

Me pasa que leyendote me voy para atras y recuerdo mi infancia,luego la de mis hijos,luego la de los nietos.Es muy cierto que son dias diferentes para todos y en todo el mundo.Los espiritus sacan su lado lindo y bailan al son del amor,la inocencia y la alegria(suceden mil cosas,segun las ideas y las tradiciones,de algun modo volvemos a ser todos niños),La vida es un circulo,(una moneda con dos caras)como somos parte de un mundo en evolución,disfrutemos de dis diferentes en su medida,respetando a cada cual y sus tradiciones.Te dejo un abrazo y si me dices donde el cafe,me subo al ire y voy.

Dyhego dijo...

Sí, vamos a disfrutar de lo que venga.
Salu2, Ernesto.

Ana dijo...

Se acabo la navidad y todo el ajetreo, en mi caso agradecida por lo bueno que ha traido y también aliviada por recuperar mis rutinas ji,ji.

La foto que nos pones incita a la tranquilidad de un café con buena conversación. Curiosamente hace un rato, sobre las cinco precisamente, me tomé un té que bien podría haber sido un café, según el día.

Un abrazo Ernesto🌸